30 ago 2010
La vida se divide en etapas.. La primera cuando no queremos nada más que jugar, disfrutar con los demás niños en el parque, reirnos, llorar, estar con la gente que muestra interés por nosotros y ni siquiera sabemos quienes son en realidad. Crecemos un poco y vamos conociendo personas como nosotros, que empiezan a formar parte de nuestro alrededor..vamos poniendo nombre a esas personas que vemos cada día..papá, mamá, abuelo... Continuámos creciendo y nos vamos dando cuenta de que necesitamos a nuestro lado a una persona con la que compartir todo.. una persona que conozca al cien por cien nuestros gustos, lo que no nos gusta, nuestras aficiones, nuestro color favorito, nuestro animal favorito, playa o montaña..todas esas cosas.. Alguien que nos haga sentir únicos, especiales, envidiables, felices, perfectos... Alguien para el cuál solo tenemos ojos a pesar de la infinidad de defectos que tiene y que no somos capaces de ver porque para nosotros es perfectamente perfecto. Alguien que nos quiera por como somos y no por lo que tenemos o dejamos de tener... Alguien que tan solo con los ojos sea capaz de mostrar todos sus sentimientos sin ni siquiera abrir la boca, decir una sola palabra.. alguien que con un beso, un abrazo, una caricia, un gesto insignificante.. es capaz de hacer que rebosemos felicidad por todo nuestro cuerpo e incluso que llegue al infinito.. Alguien que comprenda y comparta los miedos que poseemos cada uno y a la vez los haga frente contigo. Alguien que sin lugar a dudas nos quiera sin ningún tipo de condición y en todo momento lo demuestre
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